viernes, 8 de junio de 2012

La teoría y la práctica son la materia prima de una empresa

Algunas de las empresas tienen éxito y marchan con dueños empíricos que manejan cada esquina de sus empleados con una función. Otros estudian 5 años, hacen especializaciones y tienen éxito en el mercado. Son los casos más cotidianos y de debate en la actualidad. Actualmente las academias forman a los universitarios en la creación de Pymes para que generen empleo. Algunos crean proyectos a mediano y largo plazo. Otros le apuntan a convocatorias municipales o departamentales para montar su propio negocio.

Habrá personas que trabajarán de manera independiente y en algunos casos prestarán dinero para su oficio. Sin embargo el panorama para empezar y adquirir la experiencia es diferente. Cuando un individuo se presenta a una empresa pasa por un proceso de selección que requiere experiencia y es ahí donde muchas empresas se quedan estancadas al igual que los aspirantes porque no brindan la oportunidad. También otros ejercerán cargos a gusto o disgusto porque no hay empleo. Es un punto de equilibrio formar estudiantes con la realidad. Cada maestro debe explicar sin egoísmo la realidad en una empresa, porque el lenguaje y la tecnología están en constante evolución. Por otra parte desde el lenguaje de cada gerente se puede conocer su pasado. Explico, porque los empresarios exitosos son exigentes y tratan bien a sus empleados. 

Estrategia para que no hablen mal de la empresa y su familia a futuro continúe con la compra de los productos. A otros dirigentes no les importa ejercer un buen discurso con los trabajadores, si hacen algo mal los ofenden y les hacen creer que son los peores. Son aquellas empresas por las que pasan un sin número de empleados, de pronto tendrán posicionada la marca pero sus productos varían cada año y el cliente puede cambiar el interés por los nuevos que llegan con los nuevos tratados de comercio. Algo que puede llevar a la quiebra. 

Las capacitaciones son importantes en cada empresa pero no de un día, mínimo serían quince jornadas para que en el futuro se eviten correctivos. Cada persona que reciba una instrucción de buena manera seguro va a trabajar mejor que antes y por ende aumentará su nivel en la compañía. Existe desde el discurso una amenaza para cada asalariado por parte de los jefes que creen que hay más personas en la fila y el empleado es reemplazable. 

Si se hace algo mal se despedirá y a futuro habrá miles de hojas de vida. Una empresa debe ser una familia, por lo menos muchos le apuestan a la estabilidad, porque cada director sabe que la información que adquiere cada individuo es dinero invertido en las empresas. Desde mi punto de vista y por experiencia tengo la seguridad que los jefes que desde jóvenes se formaron como dirigentes son humildes y sencillos. Muchos de ellos formados desde los valores humanos, esos jefes caseros que nunca se olvidan. Conozco otros que con el tiempo ascendieron el cargo y perdieron esa sencillez, olvidaron el liderazgo y se subieron al escritorio. Probablemente no contrataría ese tipo de personas por sabios que fueran. 

 Además es importante que los empleados tengan conocimientos teóricos y desempeñen una buena labor en la práctica. Debido a que en algunas ocasiones los estudiantes de periodismo o cualquier profesión utilizan un discurso de cambio, llegan al medio de información y se encuentran con un panorama diferente. Finalmente hay varias formas de triunfar, cada quien elige su estrategia, si por amistad, romances o talento.

Por : John Hernández
@periodistaregio 

Foto: Cortesía

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